En un ámbito tecnológico en el que la mayoría de los avances parecen provenir de Estados Unidos y China, es importante prestar atención a las propuestas que emergen desde Europa. Es precisamente en Europa donde ha surgido la inteligencia artificial conversacional de Moshi, que quizá no te resulte familiar, pero que trae consigo algo que tanto OpenAI como Apple Intelligence persiguen.
El origen de este sistema de IA se encuentra en la empresa Kyutai, que probablemente tampoco te suene, pero que desde su fundación a finales de 2023 ha recibido hasta 300 millones de euros de financiación de donantes europeos acaudalados. Además, es de código abierto, un aspecto en el que no sobresalen precisamente algunos de los modelos más conocidos provenientes de Silicon Valley.
¿Qué es Moshi y en qué se diferencia de otros sistemas de IA?
La película ‘Her’, estrenada hace ya once años, presentaba una trama sumamente futurista para su época al mostrarnos a su protagonista, interpretado por Joaquin Phoenix, enamorándose de un robot. Más específicamente, de un asistente dotado de inteligencia artificial. Aunque en aquella época ya existían, no eran tan avanzados como los que podemos imaginar en la actualidad.
En mayo, los creadores de ChatGPT presentaron su propia versión de ‘Her’, introduciendo una nueva variante del chatbot que mejoraba la interacción conversacional al añadirle nuevas funciones y una fluidez propia de un ser humano. Y es precisamente esto lo que Moshi ofrece ahora, aunque en el caso de OpenAI aún no ha sido lanzado.
Respaldado por millonarios como Eric Schmidt, Hervé Jégou, Patrick Pérez, Rodolphe Saadé o Xavier Niel, Moshi pretende competir con la propuesta presentada por OpenAI de “la inteligencia artificial conversacional definitiva”. Un modelo que opera con más de 7.000 millones de parámetros y una latencia mínima de apenas 200 milisegundos.
Moshi tiene la capacidad de procesar rápidamente el audio de nuestra voz y generar su propia respuesta al mismo tiempo, destacándose por su habilidad para expresar más de 70 emociones en distintos estilos, lo que le brinda una naturalidad muy al estilo ‘Her’ y similar a lo ofrecido por OpenAI.
Un proyecto de código abierto y con disponibilidad limitada para pruebas
Si algo distingue a Moshi de otros proyectos de IA es su empeño en dejar en claro que se trata de una inteligencia artificial. Por ello, añaden marcas de agua que la identifican como tal, evitando así que alguien pueda utilizarla con malas intenciones y generar fake news.
Aunque lo destacable de Moshi es que el código estará totalmente disponible para cualquier persona, en un gesto de transparencia por parte de la compañía que lo ha desarrollado. No obstante, esto es algo futuro, ya que por ahora sigue siendo cerrado al no haber sido “lanzado” oficialmente.
Aún se busca mejorar el sistema y principalmente abordar todas las preocupaciones de seguridad que inquietan tanto a los usuarios como a la Unión Europea, lugar de origen del proyecto. Por ello, para probarlo se debe acceder a través de la web de manera sumamente limitada, ya que actualmente solo funciona en inglés y posee un límite de tiempo de cinco minutos. Además, se advierte que en ciertas regiones de Estados Unidos podría funcionar con menor latencia que en Europa.
Un proyecto que, hasta ahora, difiere notablemente de lo que será Siri
Imagen: Apple
A juzgar por lo que hemos podido observar y probar, a la espera de su lanzamiento oficial, la futura Siri será muy potente y, finalmente, distinta a lo que hemos visto en los últimos años. Se convertirá en un asistente real capaz de resolver todas nuestras inquietudes y peticiones basándose en la información que posee el iPhone. Y en situaciones en las que su conocimiento sea insuficiente, podrá brindarnos acceso rápido a ChatGPT.
No obstante, por el momento, Apple no tiene previsto incorporar algo similar a lo de Moshi. De hecho, no han modificado ni siquiera la voz de Siri. Si bien Siri acepta instrucciones en lenguaje natural y comprende el contexto, en cuanto a sus expresiones sigue siendo idéntica a la de siempre. No es que utilice un tono o expresión robótica, pero se aleja significativamente de iniciativas como las de OpenAI y Moshi.
A pesar de su buen rendimiento inicial, a Moshi aún le falta contar con una empresa robusta detrás
Sin embargo, modelos como estos han sido en cierto modo un anhelo por parte de los usuarios desde que en 2011 Apple presentara la primera versión de Siri. En cualquier caso, ante los impresionantes avances proporcionados por el conjunto de modelos que conforman Apple Intelligence, parece que la idea de una IA conversacional no será una prioridad ni para los usuarios ni para Apple.
En cualquier caso, lejos de ser un proyecto perfecto, a Moshi aún le faltan algunos aspectos por resolver. Una de las características destacadas de Apple es su reputación internacional. OpenAI ha sabido ganarse su propia reputación, aunque también asociándose con grandes compañías como Microsoft o más recientemente con Apple. Esto será crucial para su futuro y su éxito o fracaso. Únicamente una inversión millonaria no garantiza nada. Y si no, que se lo pregunten a Humane.
