Airbnb atraviesa un periodo complicado. Sus ganancias han disminuido en los últimos meses, y los especialistas consideran que la responsabilidad recae en los anfitriones. El antiguo espíritu que transformó el alojamiento vacacional parece haberse desvanecido, debido a la codicia y la “profesionalización” de los anfitriones.
Al menos así lo piensan Michael Rozenblit y su socia Maggie, creadores de un portal de viajes, en Business Insider. Por razones evidentes, han arrendado cientos de viviendas y cuartos en Airbnb, y han constatado de primera mano las transformaciones adversas que se están generando.
Estos especialistas en viajes sostienen que las tres razones de los problemas de Airbnb son el incremento de los costos, el alza de las tarifas, y el deficiente servicio de los anfitriones.
La “profesionalización” de Airbnb
Airbnb transformó el hospedaje ocasional hace ya varios años, facilitando el arrendamiento de viviendas particulares por un corto periodo, ya sea para viajes de negocios o vacaciones.
Se trató de un éxito inmediato, ya que hospedarse en una casa particular en lugar de en un hotel resultaba mucho más económico, más versátil, y más acogedor.
Al comienzo, los anfitriones eran amables y hospitalarios, y los huéspedes, respetuosos y considerados. Con el gran “boom” de Airbnb, parece que todo eso se ha esfumado. El crecimiento del negocio ha atraído a clientes groseros que dejan los apartamentos desordenados, roban pertenencias, o abusan de la estancia de diversas formas. Por ejemplo, minando criptomonedas:
No obstante, para Michael Rozenblit, la principal razón de los problemas de Airbnb son los anfitriones.
Muchos de ellos se han “profesionalizado”, arrendando su vivienda casi durante todo el año, lo que ha llevado a la pérdida del carácter acogedor y amigable de los primeros años de Airbnb.
Aparentemente, muchos anfitriones ni siquiera proporcionan papel higiénico, bolsas de basura y café. Y han incrementado tanto los precios, que muchas propiedades de Airbnb son más costosas que un hotel.
Lo mismo se aplica a las tarifas adicionales que se cargan en ciertos casos. Según relata Rozenblit en Business Insider, incluso cuando los huéspedes se encargan de la limpieza, de sacar la basura y retirar las sábanas, se han topado con tarifas de limpieza de 400 dólares.
No es sorprendente que, con el incremento de los precios, las altas tarifas, y la deficiente atención de los anfitriones, muchos clientes hayan regresado a los servicios de arrendamiento de apartamentos y hoteles convencionales, como Booking.
En el último trimestre, las ganancias de Airbnb han disminuido un 15%, estableciéndose en 555 millones de dólares, aunque al sumar todo 2024, continúan siendo positivas.
Airbnb enfrenta una “tormenta perfecta”, porque al deterioro del servicio se suman las críticas en muchas ciudades turísticas, como Barcelona, al turismo masivo. También se atribuye responsabilidad al alquiler turístico, por el incremento desproporcionado del costo de la vivienda. Podría ser que estemos presenciando un cambio de ciclo.